Todo terminará, algún día el tiempo dejará de ser lineal y de tener sentido, algún día las horas no significarán nada, la noción de los meses quedará vacía,
nos veremos, sí, a los ojos, a las sonrisas, y a ese abrazo amenazado que se petrifica en la duda misma
somos más fuertes que esto.
un día alguien sabrá ver lo que valgo, me entenderá y querrá estar a mi lado.
Al igual que todas las tormentas transitadas, y con algunas bajas de por medio, esto también pasará.
no dirán más que simples anhelos, retazos de sentimientos, recortes de sensaciones, pedazos de amor, piezas de lo que éramos, talvez de lo que somos o seremos, algún día nos encontraremos en ese vacío en el que todo y nada goza de un sentido.
que nos regalamos, se estancarán en una de aquellas sonrisas, poco a poco derritiéndose en angustiosa mueca, y así
salen de la boca que le corresponden.
cobrarán mayor sentido; o no serán necesarias.
que quedaron sin decir, podrán finalmente cumplir su destino
observar, cómo si fuese un gasto y amplio mar, todo lo que nos queda delante, o detrás, todo lo que hemos dejado de nosotras, de nosotros,
revelarte la luminosidad de tu alma
acariciar lo que nos separa.
no mirar atrás; no añorar o extrañar aquello que ya no sucederá.
Contemplar la orilla opuesta de este inmenso valle
en ese último instante, podremos crear, renacer, rehacer, e intentar nuevamente, aprender y aprehender, y sobre todo, comprender(nos).
dejar que mis labios evaporen quinquenios de buen amor.
agradecer cada día.
sabré que el recorrido valió la pena.
Suspirar agradecida, sin miedos, sin pendientes, y así esperar mi suerte.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario